“Los pampeanos vamos a demostrarle a los organismos internacionales de crédito que pretendan financiar a Portezuelo del Viento que la obra es inviable en los términos que propone Nación. El proyecto fue tres veces judicializado y es ambientalmente insostenible”. Lo expresó el gobernador Carlos Verna, por las redes sociales.
La represa, que se ubicará sobre el río Grande -tributario del Colorado, en el sur mendocino- es impulsada fuertemente por Nación y Mendoza. La Pampa se resiste: entre otros puntos, porque considera que podría afectarse la calidad y cantidad de agua del río Colorado. Además viene denunciando que es inviable ambiental y económicamente.
Ayer al mediodía se oficializó el llamado a licitación de Portezuelo del Viento, la postergada megaobra hidroeléctrica. La novedad fue que el proyecto no será financiado a través de Participación Público-Privada (PPP), sino por organismos multilaterales, bilaterales o bien por el Tesoro de la Nación.
En septiembre, el gobernador pampeano había advertido de los PPP: explicó que, con esta forma de financiamiento, las empresas que participaran de la obra -luego de una licitación- debían recuperar el dinero con lo recaudado por la venta de energía eléctrica. “El trabajo de los pampeanos es explicarles a los particulares interesados en hacer la obra que la generación eléctrica es la tercera parte de lo que dice Mendoza: ellos dicen que será de 210 megas y nosotros hemos demostrado que son 76 megas. Eso es decisivo para calcular la tasa interna de retorno”, llegó a decir.
Ahora, sin los PPP, ya Verna no apuntará a las constructoras para que desistan de avanzar con la obra: directamente irá a persuadir a los organismos internacionales de crédito.